PERIODO DE ADAPTACIÓN
El periodo de adaptación es la fase
transitoria por la atraviesa el niño cuando se incorpora por primera vez al
centro educativo. Es una situación que afecta al niño, a las familias, a las
educadoras y al centro en su conjunto por lo que debemos abordarlo como una
cuestión colectiva y una intervención respetuosa con nuestros pequeños.
La incorporación del niño a la escuela
supone un periodo de socialización en la que nuestros niños/as pasan de un
entorno familiar a uno totalmente desconocido, comienza a establecer nuevos vínculos,
a adquirir y afianzar progresivamente su autonomía personal, pilares básicos para la
estructuración de su personalidad.
Para las familias, la escuela también
es algo nuevo y desconocido, os separáis de vuestros hijos/as y depositáis toda
vuestra confianza en nosotros como
centro educativo.
Pero también es un periodo de
adaptación para las educadoras que tiene que adaptarse pues cada niñ@ es diferente, hay que conocerle, saber
sus gustos, preferencias, conseguir que disfrute y que se encuentre feliz en nuestra escuela.
Estos primeros días en la escuela han
sido intensos y emocionante. Han finalizado las ansiadas vacaciones y ya
estamos viviendo las primeras aventuras de este curso que acabamos de inaugurar.
Durante las primeras semanas nos
centramos en conocer a los compañeros, a las educadoras, explorar los espacios
del centro (aula, patio, comedor,…) y los materiales del aula, cantar canciones,
contar cuentos, jugar libremente,… y disfrutar de cada descubrimiento.
Los más pequeños se centran en ellos mismos, su manos, sus pies, sus dedos ... pero también se dedican a descubrir todos los objetos que Mina y Marta ponen a su alcancen.
Les rodea un mundo asombroso que tiene que descubrir.
Los pequeños de la zona del bosque aún se encuentran un poco desubicados. Hay nuevos espacios y materiales que investigar y muchos amigos que conocer.
Este curso va a suponer para ellos toda una aventura porque tienen por delante un mundo asombroso por descubrir.
Los mayores del colegio están encantados de volver al cole con sus amigos. Después de las vacaciones es duro regresar a la rutina, a madrugar, separarnos de papá y mamá,... pero una vez empezado el día no podemos dejar de jugar, cantar, contar cuentos, zambullirnos en la piscina de bolas,... Y es que nosotros ya sabemos lo bien que lo pasamos en el colegio y nos ha costado poco recordar que esta escuela es divertida y que si el año pasado aprendimos muchas cosas seguro que este curso no vamos a dejar de asombrarnos ante el mundo que tenemos por descubrir.
Durante estas primeras semana y para que todos llevemos mejor el periodo de adaptación es aconsejable:
- Dejar al niñ@ con una actitud positiva. Transmitiendo al niño que estamos seguros del lugar donde los dejamos.Actuar con normalidad, sin tristeza, culpabilidad o inseguridad por dejarlos en la escuela.
- Hacer una despedida breve. No alargar el momento de la separación porque haremos más dura la separación y podemos dar a entender al niño que dudamos y hay posibilidad de que no se quede en la escuela.
- Es bueno si el niño lleva algún apego que le dé seguridad. Peluche, chupete, mantita,... que le de seguridad emocional y bienestar.
- Es posible que en el reencuentro con sus padres el niñ@ llore o muestre indiferencia. Son manifestaciones que los padres no deben tener en cuenta ni preocuparse. Debemos actuar con normalidad.
Poco a poco el niño se va a ir adaptando a las nuevas rutinas, se familiarizará con el centro, establecerá vínculos con la educadora y los compañeros y asumirá con tranquilidad los momentos de separación y reencuentro con la familia, así como la asistencia diaria al centro como parte de su día a día.
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